En este proyecto, nos enfrentamos al desafío de mejorar la accesibilidad del edificio, y la solución fue tan funcional como estéticamente atractiva. La clave fue llevar el ascensor a cota 0, garantizando que todos los residentes, independientemente de sus necesidades de movilidad, puedan acceder fácilmente a sus hogares.

En cuanto al diseño, nos sumergimos en una renovación estética que fusionó la modernidad con la calidez. Optamos por baldosas cementosas que no solo añaden un toque contemporáneo, sino que también ofrecen durabilidad y fácil mantenimiento, perfectas para un espacio de uso común. Los panelados de madera se convirtieron en el elemento central, aportando un ambiente acogedor y un toque natural al entorno. Para realzar aún más la estética, incorporamos detalles en acero, creando una fusión armoniosa entre lo rústico y lo industrial.

El resultado final es un portal comunitario que no solo cumple con los estándares de accesibilidad más exigentes, sino que también se erige como un testimonio de diseño contemporáneo en el corazón de Valladolid.

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